Hay un antes y un después de la llegada una crisis sanitaria mundial como la generada en 2020, en la forma de entender nuestras prioridades vitales y por tanto en la forma en la que vemos ahora nuestros hogares . Después de pasar meses enteros sin salir de casa por un confinamiento más o menos extenso según el país en el que se resida, tener una casa con un jardín donde disfrutar de tiempo fuera o con una terraza con vistas al mar es un lujo al que no deberíamos renunciar.
Quizás al principio las restricciones a la hora de moverse fueron mayores, pero ahora la tendencia apunta al distanciamiento social, a las reuniones de pequeños grupos de amigos o familiares, al aislamiento. Con este panorama, las opciones pueden ser dos: encerrarse en un pequeño apartamento oscuro en el centro de una bulliciosa ciudad europea o disfrutar del tiempo en casa en lujosa propiedad del mercado inmobiliario en la Costa del Sol.
Por qué este es el mejor momento para invertir en el mercado inmobiliario en la costa del Sol
Si retrocedemos varios meses, al inicio del 2020, el mercado inmobiliario en la Costa del Sol presentaba unas excelentes perspectivas, con casas que alcanzaban precios de récord. Todo apuntaba a que comprar una casa en Málaga sería el privilegio de unos cuantos. Sin embargo, en marzo de 2020 se imponía en confinamiento y se restringía al máximo la movilidad, y ello congeló esas previsiones, que pronto harían que el mercado se preguntara ¿ Es ahora el mejor momento para adquirir una propiedad ?
Nunca como entonces se había pasado tanto tiempo en el hogar. Nunca se había dado dando valor a cada metro de la casa. Nunca se había añorado tanto cada minuto de Sol del que se podía disfrutar. Y, en muchos casos, nunca se había echado tanto de menos tener una terraza, o un balcón, al que poder salir a diario. Lo que parecía algo temporal, pronto se convirtió en algo a largo plazo.
Ante esta realidad, fueron muchos los que empezaron a pensar en buscar un lugar para vivir que ofreciera todo aquello de lo que no se disponía en casa: viviendas espaciosas, amplias terrazas y más horas de sol en casas ubicadas en zonas verdes y cerca del mar… La costa del Sol se presentaba como el destino perfecto para pasar la crisis generada por el virus a nivel mundial.
Los nacionales españoles fueron los primeros en darse cuenta de que la Costa del Sol era el destino perfecto en el que pasar un confinamiento; además, con las nuevas perspectivas del mercado inmobiliario, era un buen momento para aprovechar los buenos precios; y ciudadanos europeos que ya conocen el sur de España también comenzaron a pensar en qué si estaban obligados a quedarse en casa, ¿por qué no podía ser esta una espaciosa vivienda de la Costa del Sol?
Por otro lado, el confinamiento ha supuesto un aumento del teletrabajo y, por lo tanto, la posibilidad de poder desde la comodidad del hogar, un hogar que puede estar ubicado en cualquier lugar del mundo, incluso en uno soleado y con temperaturas tan agradables como las que ofrece la Costa del Sol. Desde luego, la idea de tener una amplia oficina en casa o, incluso, de poder trabajar en la terraza, disfrutando de la visión del Mediterráneo no puede ser más atractiva. Una ventaja añadida es la buena conectividad que ofrecen ciudades españolas como Málaga o Marbella.
Todo ello sin renunciar a los muebles más queridos, ya que además es muy fácil trasladarlos a sur de España por carretera desde cualquier punto del territorio europeo.
El COVID-19 trajo cambios que parecían sentenciar el mercado inmobiliario en la Costa del Sol; sin embargo, el tiempo ha demostrado que los cambios no tienen por qué ser malos. De hecho, el nuevo panorama ofrece muchas posibilidades para la nueva generación de propietarios de viviendas, con cifras que ya van en alza en el mercado inmobiliario de la Costa del Sol y con muy buenas perspectivas para el futuro. Por lo tanto, es un buen momento tanto para aquellos que buscan el tipo de propiedad que ha demostrado ser el mejor lugar para vivir durante el 2020, como para inversores que buscan oportunidades de negocio, ya que la Costa del Sol es uno de los destinos más populares para ciudadanos de toda la UE.